El parto prematuro

¿Qué puede causarlo y cómo se presenta?

Existen varias causas para que se presente una amenaza de parto pretérmino, entre ellas se encuentran varias enfermedades de la madre y también ciertas condiciones del feto como la presencia de malformaciones congénitas. Entre las causas relacionadas con la madre se encuentran ciertas enfermedades, condiciones anatómicas como malformaciones del útero, accidentes y traumatismos y hábitos tóxicos.  



Hay otros factores que pueden considerarse riesgosos, entre ellos: embarazo múltiple, edad materna menor de 20 o mayor de 35 años, estado nutricional de la madre, el estrés emocional o físico, incluso condiciones socioeconómicas limitadas.

Los síntomas comunes que presenta habitualmente una mujer gestante con amenaza de parto pretérmino son: contracciones uterinas que se manifiestan con dolor de tipo retortijón o cólico y ocasionalmente sangrado vaginal escaso. Las pacientes también pueden presentar dolor en la espalda baja o región lumbar, que se presenta de manera continua.

¿Cómo actuar ante la situación?

Frente a la posibilidad de un parto pretérmino, es fundamental buscar atención especializada en Obstetricia es de vital importancia. Esta atención se enfocará en confirmar el diagnóstico, y para esto se realizará un monitoreo fetal y de la actividad uterina, junto con una evaluación directa del cuello del útero.

Una vez confirmado el diagnóstico, el abordaje puede ser diferente de acuerdo con la edad gestacional, es decir, qué tan avanzado se encuentra el embarazo. El manejo también puede variar dependiendo de la madurez de los pulmones del feto, siendo este un factor que permite evaluar o pronosticar la sobrevida del recién nacido. Afortunadamente hasta el 80 % de las consultas realizadas por sospecha de amenaza de parto pretérmino, pueden ser atendidas de manera ambulatoria y el embarazo continúa.



Existen varias posibilidades terapéuticas, sin embargo, prácticamente todas se concentran en prolongar la gestación lo suficiente como para alcanzar una maduración pulmonar fetal que aumente las probabilidades de sobrevida del feto. Las recomendaciones, sin entrar en el campo de la farmacoterapia, tienden a promover el reposo físico y emocional y la vigilancia permanente de los síntomas. Existen varios recursos terapéuticos que le permiten al especialista llevar adelante con éxito el cuidado perinatal.

¡Hay que enfocarse en prevenir!

Al igual que cualquier otra situación patológica que ocurra durante la gestación, lo más importante es la prevención: abandonar hábitos tóxicos, aumentar las horas de ejercicio sin que llegue a ser extenuante y acudir a todas las citas de control prenatal.

Finalmente, no se debe olvidar que el parto pretérmino implica una insuficiente madurez neonatal, y son un motivo frecuente de complicaciones e incluso de muerte neonatal por lo cual es imperioso que las mujeres gestantes tomen todas las precauciones para evitar esta temible situación, así que recuerden consultar a su especialista en Ginecología y Obstetricia de su confianza.


En el Instituto de Salud Integral de la Mujer ayudamos a mantener la salud de la madre y su futuro hija o hijo mediante controles de mujer sana y la valoración del bienestar fetal. 



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